Gracias a ChatGTP hoy el término “Inteligencia Artificial” o “IA” ha tomado, nuevamente, un lugar preponderante en las conversaciones diarias. Aunque parezca novedoso, el concepto de IA data de hace casi 100 años. Más precisamente, de cuando en 1943 comenzaron a aparecer los primeros artículos al respecto.
La película “Descifrando el Enigma” (The Imitation Game, en inglés) relata la vida del científico Alan Turing, quién en 1950, ideó la primera prueba para medir si una máquina exhibía un comportamiento inteligente. En ese momento, según Turing, si la máquina podía sostener una conversación de 5 minutos y convencer al humano más del 70% de ese tiempo, entonces nos encontraríamos frente a una máquina inteligente.
A partir de ese momento, la idea de inteligencia artificial, y sus posibles aplicaciones e impacto, comenzaron a tomar un lugar de gran relevancia en el pensamiento humano, plasmado en la literatura, el cine, y en el miedo generado por sus posibles consecuencias.
Sin embargo, y a pesar de este halo de misterio que se le suele otorgar, la IA está presente en casi todos los dispositivos con los que interactuamos a diario. Por ejemplo, al acercarse el cumpleaños de nuestro amigo al que le gusta pescar los fines de semana, Instagram nos mostrará productos de pesca, incluso aunque nosotros nunca nos hayamos acercado a un río en nuestras vidas.
Nadie sabe, ni siquiera Instagram, qué es lo que lleva a esa decisión, sino que al ser un algoritmo que desea que uno pase más tiempo con él, sabe qué debe mostrarnos para alcanzar este objetivo. Todo algoritmo que produzca un resultado a partir de acciones anteriores de usuarios puede ser considerado lA.
Pero el punto máximo de la IA estuvo siempre ligado a la idea de un robot inteligente capaz de crearse a sí mismo, o incluso a otros robots.
El día que cambió la historia
El pasado 1 de febrero, Aptugo, la herramienta disruptiva de desarrollo de software que permite programar tanto de manera visual como tradicional, lanzó la versión alpha de su nuevo producto “Aptugo Lite”, una herramienta no-coding (un sistema de software capaz de generar aplicaciones software sin ninguna línea de código) destinada a crear páginas web y sistemas de software sencillos (fidelización de clientes, armado de menús para restaurantes y bares, etc).
Lo que distingue esta herramienta de todas las demás no-coding en el mundo, es que ninguna línea de código necesaria para su creación fue escrita por un humano, sino que fue íntegramente generada por el motor de Aptugo. En otras palabras, el robot de Aptugo ha generado otro robot, “Aptugo” Lite, algo que ninguna otra herramienta en el mundo había logrado hasta el momento.
Más aún, la IA desarrollada por el motor de Aptugo permitió algo inédito. Mientras que las herramientas de otros competidores, como Bubble, requieren de cientos de desarrolladores y otros cientos de millones de dólares de inversión para innovar, “Aptugo Lite” fue creada por tan solo un puñado de desarrolladores principiantes o “junior” surgidos de las capacitaciones de la empresa, guiados por nuestro director de Tecnología.
La versión alpha de “Aptugo Lite” ya está siendo utilizada por un grupo selecto de usuarios que fueron invitados de manera exclusiva. Se espera el lanzamiento de su versión beta y accesible directamente al público en marzo de 2023.
Asimismo, Aptugo ya está trabajando en generar alianzas con distintas empresas a fin de seguir capacitando a más desarrolladores, con el objetivo sostenido de llegar a los 100.000, y así poder crear nuevas oportunidades de innovación, movilidad social y crecimiento económico para la región.